Reconocen su gran labor como misionero; Río Grande, tierra de migrantes que tendrán refugio en su nueva sede, dijo
Riograndenses se reunieron para despedir a quien fue párroco de Santa Elena de la Cruz, obispo auxiliar de Durango y ahora recién nombrado obispo de Nuevo Laredo, Tamaulipas, monseñor Enrique Sánchez Martínez.
Las tres parroquias de Río Grande, Santa Elena de la Cruz, Señor de la Santa Veracruz y Nuestra Señora de la Luz, recibieron al obispo de Nuevo Laredo, quien durante su mensaje de despedida mencionó que “yo sé que gran parte de la población de Río Grande, está en Estados Unidos, no se les olvide ahora llegar al obispado, ahí será su nueva aduana, podrán descansar y comer algo, para continuar su camino”, dijo a los presentes en la ceremonia de despedida.
Con alegría y nostalgia por la partida del pastor, la feligresía se acercó para agradecerle el tiempo que estuvo en Río Grande, así como el trabajo que realizó en todas las comunidades, en los grupos y movimientos, entre ellos, la fundación del grupo de Adolescentes, “EPA”, así como el respaldo a los grupos juveniles JESAD, ACJM, JCFM, Y MFC, entre otros.
De igual manera, Sánchez Martínez, será recordado por su trabajo al encabezar la formación de la Asociación civil Casa Hogar Santa Elena, que el día de hoy es una casa hogar, para las y los residentes de esta institución, por lo que a su vez agradeció el respaldo de las autoridades de Río Grande, las estatales y federales, para poder consolidar este gran proyecto.
Entre aplausos y oración, Sánchez Martínez, agradeció el cariño que la gente de Río Grande, le transmitió no sólo en los más de 3 años que estuvo en este municipio, sino hasta la fechay les invitó para que lo acompañen en su toma de posesión en Nuevo Laredo, el próximo 13 de enero en punto de las 6 de la tarde.
Sánchez Martínez, dijo que de especial manera, tiene un cariño muy grande por la parroquia de Santa Elena de la Cruz, puesto que fue su primer parroquia, la cual le dejó grandes enseñanzas, y la lleva presente en sus oraciones.